Es una respuesta a una pregunta enviada de la revista "Al-Guil", Riad, sobre el rango de la mujer en el Islam.
Las alabanzas son únicamente para Allah, la paz y las bendiciones sean con su Mensajero más honrado, su Familia, sus Compañeros y aquellos que siguen su camino hasta el Día de la Retribución. La mujer musulmana tiene un rango muy alto en el Islam y un gran efecto en la vida de cualquier musulmán; es la primera escuela en la constitución de una buena sociedad, si esta mujer sigue las instrucciones del Libro de Allah y la Sunna de Su Mensajero -la paz y las bendiciones de Allah sean con él-. Porque aferrarse a ellos aleja a los musulmanes de todo extravío. Pues la desviación y el extravío de las comunidades son motivados por dejar el camino de Allah -Exaltado y Glorificado sea- y el de Sus Profetas y Mensajeros -la paz y las bendiciones de Allah sean con ellos-. El Profeta dijo:
Dejo entre vosotros dos cosas que nunca os desviaréis siempre que os aferréis a ellas: el Libro de Allah y mi Sunnah.
También se mencionó en el Sagrado Corán lo que indica la importancia de la mujer, como madre, esposa, hermana e hija, y sus deberes y derechos que fueron detallados por la Sunna honrada.
Su importancia consiste en lo que soporta de problemas y dificultades que superan en algunos casos los del hombre. Por lo tanto, agradecer, obedecer y tener buena compañía con la madre es entre los más importantes deberes y en este contexto se adelanta al padre, Allah -Exaltado sea- dice:
Hemos encomendado al hombre que trate bien a sus padres.Su madre lo llevó en el vientre fatiga tras fatiga y fue destetado a los dos años. Sé agradecido conmigo y con tus padres.A Mí has de volver.
Allah -Exaltado sea- dice:
Y le hemos encomendado al hombre que haga el bien a sus padres. Su madre lo llevó en el vientre con fatiga, y con fatiga lo parió, durando su embarazo y la lactancia treinta meses.
Asimismo, vino un hombre al Profeta y dijo:
¡Mensajero de Allah!, ¿quién de entre las personas merece más mi buena compañía? Dijo: "Tu madre". El hombre preguntó: "Luego, ¿quién?" Dijo: "Tu madre". El hombre preguntó: "Después, ¿quién?" Dijo: "Tu madre". El hombre preguntó: "Luego, ¿quién?" Dijo: "Tu padre”.
Es decir, se dedica a la madre el triple de obediencia en comparación con el padre.
También la aleya coránica refleja el rango de la mujer y su efecto sobre la serenidad del alma, Allah -Exaltado sea- dice:
"Y parte de Sus signos es que os creó esposas sacadas de vosotros mismos para que encontrarais sosiego en ellas y puso entre vosotros amor y misericordia". 30:21
En la exégesis de esta aleya, Al-Hafizh ibn Kathir -que Allah tenga misericordia con él- dijo que esta aleya se refiere al amor y a la clemencia. Ya que un hombre vive con su mujer bien por amarla, o tener misericordia con ella; a través de tener un hijo de ella.
En este sentido es digno de mencionar la actitud heroica de Jadiya -que Allah esté complacido con ella- que tuvo un gran efecto en calmar al Profeta cuando el Arcángel Gabriel descendió con la revelación en la cueva de Hira´por primera vez, llegó a casa sacudiéndose y dijo a ella:
"¡Cúbreme, cúbreme!, temí por mi propia vida" .Ella, que Allah esté complacido con ella, le dijo: "¡Alégrate!, Allah nunca te humillaría; mantienes los lazos con tus parientes, eres veraz en tu palabra, ayudas a los necesitados, socorres a los débiles, alimentas al huésped y respondes a la llamada de aquel que está en dificultad".
Asimismo, es inolvidable el papel que desempeñó ‘A’isha -que Allah esté complacido con ella- pues los grandes Compañeros narraron muchos hadices según ella y emitía fatwas relacionadas con las mujeres. En un pasado cercano, en la época del Imam Muhammad ibn Su‘ud -que Allah tenga misericordia con él- su esposa le aconsejó aceptar la llamada del Imam renovador Muhammad ibn ‘Abd Al-Wahhab -que Allah tenga misericordia con él- cuando se la ofreció. Ya que su consejo tenía una gran influencia al ponerse de acuerdo -los dos Imames- acerca de la renovación y difusión de la da'wah (invitación al Islam), donde sentimos sus esfuerzos realizados, gracias a Allah, en enraizar el credo en los pechos de los musulmanes de la península arábiga.
Es indudable que mi madre -que Allah tenga misericordia con ella- multiplique su recompensa y le conceda todo el bien, tenía un papel destacado y gran efecto en incitarme y ayudarme en mis estudios.
No cabe duda que la casa basada en el amor , misericordia y educación islámica, deja unas huellas positivas en el hombre y le hace, si Allah quiere, tener éxito en cualquier trabajo al que aspire, como los estudios, el comercio, la agricultura, etc. ¡Que Allah nos conceda a todos el éxito para hacer lo que le ama y complace! ¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!
(Número del tomo 3; Página 348-349-350)